El feminismo en Francia tiene una larga y rica historia que se remonta a mediados del siglo XIX, aunque sus raíces pueden trazarse incluso antes. Este movimiento ha sido fundamental en la lucha por los derechos de las mujeres y ha influido significativamente en el panorama social y político del país.
Orígenes del Feminismo Francés y Primeras Luchas
El feminismo francés comenzó a tomar forma después de la década de 1860. Una de las pioneras fue André Léo, seudónimo de Léodile Champseix, quien aprovechó la relativa libertad promovida por el Segundo Imperio para publicar obras dedicadas a la igualdad de género. En 1866, Léo creó la «Asociación para la mejora de la educación de las mujeres» y en 1868 publicó un texto defendiendo la igualdad de los sexos, considerado el origen del primer grupo feminista francés.
Otras figuras destacadas del feminismo temprano
- Julie Daubié, la primera mujer en obtener el bachillerato en 1861
- Paule Minck
- Amélie Bosquet
- Adèle Esquiros
Este pensamiento feminista emergente se tradujo en la creación de periódicos y organizaciones como la «Sociedad para la Mejora del Destino de las Mujeres», fundada en 1878 y presidida por Maria Deraismes, y la «Liga Francesa de Derechos de las Mujeres», fundada en 1882 por Léon Richer.
Radicalización y Primeras Manifestaciones Feministas
Entre las activistas más contundentes destaca Hubertine Auclert, quien abogaba por la huelga fiscal y buscaba registrar a las mujeres en las listas electorales. El 14 de julio de 1881, Auclert organizó la primera manifestación feminista, oponiéndose a la toma de la Bastilla y a la negativa de otorgar derechos a las mujeres. Fue Auclert quien le dio a la palabra «feminismo» su sentido actual de lucha para mejorar la condición de la mujer.
Divisiones y Crecimiento del Feminismo en Francia
El feminismo francés se dividió entre organizaciones moderadas y movimientos radicales. Un ejemplo notable es la creación en abril de 1901 del Consejo Nacional de Mujeres Francesas, que inicialmente no era feminista, pero que evolucionó gradualmente. En 1909, este consejo creó la Unión Francesa para el Sufragio Femenino, cuya membresía creció rápidamente de 6,000 en 1912 a 12,000 en 1914.
La Revolución Francesa y el Despertar Feminista
Es crucial mencionar que el feminismo en Francia tiene raíces aún más profundas. En 1789, al inicio de la Revolución Francesa, las mujeres salieron a las calles pidiendo libertad e igualdad junto a los hombres. Sin embargo, tras la victoria de la revolución, se dieron cuenta de que los ideales de igualdad, fraternidad y libertad no se extendían a ellas, lo que encendió la llama del feminismo en Francia.
Olympe de Gouges y la Declaración de los Derechos de la Mujer
En este contexto revolucionario, Olympe de Gouges redactó en 1791 la famosa «Declaración de los Derechos de la Mujer y la Ciudadana», considerada el fundamento teórico del feminismo francés en desarrollo. De Gouges, quien también militó por la abolición de la esclavitud, pagó con su vida por su activismo político.
Siglo XIX: Transformación y Luchas Continuas
Durante el siglo XIX, el movimiento feminista francés continuó evolucionando. En 1848, se creó en París «La voix des femmes», una revista dirigida por Jeanne Deroin, Eugénie Niboyet y Désirée Gay. Otras publicaciones importantes de la época incluyen La Femme Nouvelle, L’Apostolat des Femmes, La Tribune de Femme y La Femme Libre.
Siglo XX: Avances Significativos
Simone de Beauvoir y el Feminismo Existencialista
Una de las figuras más influyentes del feminismo francés del siglo XX fue Simone de Beauvoir. Su obra El Segundo Sexo, publicada en 1949, se convirtió en un texto fundamental del feminismo moderno, explorando la condición de la mujer desde una perspectiva existencialista. Y lo más interesante, en ese libro, Beauvoir dejó claro que «no se nace mujer, se llega a serlo», lo que personalmente encuentro increíblemente visionario. Me parece casi como si dijera: «¡El patriarcado es esa dieta que nunca te pediste, pero igual te sientan a la mesa!».
Luchas por los Derechos Reproductivos
En 1967, la ley Neuwirth autorizó la contracepción bajo vigilancia. Sin embargo, la lucha por el derecho al aborto continuó. En 1971, Simone de Beauvoir escribió el famoso «Manifiesto de las 343», una petición firmada por 343 francesas que admitían haber abortado, exponiéndose a procesos penales.
El aborto libre finalmente se legalizó en Francia en 1975, aprobado por la ministra de Sanidad Simone Veil, después de años de presiones del feminismo francés. Esto fue un paso gigantesco, aunque como feminista liberal, creo que deberíamos seguir vigilantes. Cada derecho ganado puede volver a estar en riesgo, y si hay algo que aprendí de la historia francesa, es que la lucha siempre vuelve a surgir cuando menos te lo esperas.
Desafíos Actuales del Feminismo en Francia
A pesar de los avances, Francia aún enfrenta desafíos significativos en materia de igualdad de género:
Feminicidios
Francia registra un alto número de feminicidios. En 2021, 113 mujeres fueron asesinadas por sus parejas o exparejas, y en 2019 la cifra alcanzó 146 víctimas. Es escalofriante pensar que incluso hoy en día, tantas mujeres sigan siendo víctimas de violencia extrema solo por su género. Como feminista liberal, me niego a aceptar que esto es inevitable.
Representación Política
Aunque el gobierno francés es paritario, con un 50% de mujeres, y las mujeres representan el 39.5% del parlamento, Francia nunca ha tenido una presidenta de la República. Yo siempre me pregunto: ¿qué pasa, Francia? Si podemos ser Simone Veil, Simone de Beauvoir o incluso Jeanne d’Arc, creo que también podemos manejar la presidencia, ¿no? ¡Ya es hora!
Brecha Salarial y Techo de Cristal
La brecha salarial en Francia era del 16.5% en 2021. La organización feminista «Les Glorieuses» calcula que, basándose en esta brecha, las mujeres francesas empezaron a trabajar «gratis» el 3 de noviembre de 2021. Para mí, esto es una locura. Si seguimos así, pronto estaremos celebrando el «día de trabajar gratis para las mujeres» como una festividad nacional. ¡No, gracias!
Mutilación Genital Femenina
Se estima que entre 60,000 y 125,000 mujeres que viven en Francia han sufrido mutilación genital. Además, más de 200,000 niñas de familias provenientes de países donde se practica esta tradición están en riesgo. Esto es algo que no podemos ignorar y debemos seguir luchando para erradicar.
Conclusión
La historia del feminismo en Francia es un testimonio de la lucha constante por la igualdad y los derechos de las mujeres. Desde sus raíces en la Revolución Francesa hasta los movimientos actuales, el feminismo francés ha sido una fuerza impulsora de cambios sociales y políticos. A pesar de los avances significativos, los desafíos persistentes subrayan la necesidad continua de activismo y concienciación en la búsqueda de una sociedad verdaderamente igualitaria.
Personalmente, creo que el feminismo liberal es el que mejor recoge la esencia de esta lucha. Nos permite avanzar sin miedo, con sentido crítico, y sí, con algo de humor, porque como mujeres ya hemos llorado demasiado por nuestros derechos. ¡Ya es hora de que riamos mientras tomamos las riendas!
